Como defensora de los derechos sexuales y reproductivos, PLAFAM consideró necesario asumir la prevención de la pandemia del virus de inmunodeficiencia humana (VIH) y de las infecciones de transmisión sexual (ITS) como una meta más dentro de sus objetivos. De este modo, a principios del año 2002, con la asesoría técnica de la Asociación Pro-Bienestar de la Familia Brasileña (BEMFAM), comenzó un proceso de revisión de los servicios con la intención de incluir,de manera transversal la prevención de las ITS, incluyendo el VIH-sida, en todos los niveles de dichos servicios.
En septiembre de 2016, los países miembros de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) aprobaron el Plan de Acción para la prevención y el control de la infección por el VIH y las infecciones de transmisión sexual 2016 -2021, el cual pretende promover una respuesta acelerada, enfocada, más efectiva, innovadora y sostenible, allanando el camino hacia la meta de poner fin a la epidemia del sida y las infecciones de transmisión sexual como problemas de salud pública en la región de las Américas para el 2030.
Las ITS se propagan predominantemente por contacto sexual, incluidos el sexo vaginal, anal y oral. Algunas se pueden transmitir también por otras vías, como la sangre, los hemoderivados, durante el embarazo o el parto. La transmisión de una ITS de la madre al niño puede causar muerte fetal o neonatal, prematuridad e insuficiencia ponderal al nacer, septicemia, neumonía, conjuntivitis neonatal y anomalías congénitas. En 2016, más de un millón de embarazadas tenían sífilis activa que causó complicaciones en alrededor de 350 000 partos, de los que 200 000 derivaron en la muerte del feto o el recién nacido
Entre las ITS conocidas se encuentran algunas como la sífilis, la gonorrea, la clamidiosis y la tricomoniasis que, si son detectadas a tiempo, se pueden tratar y evitar mayores complicaciones. En cambio, la hepatitis B, el virus del herpes simple (VHS o herpes), el VIH y el virus del papiloma humano (VPH), son infecciones víricas incurables, aunque existen tratamientos capaces de atenuar o modificar los síntomas o la enfermedad.
Contexto Actual
En la actualidad, vemos con preocupación el estigma social hacia las personas que son diagnosticadas con algunas de las ITS, situación que en ocasiones genera que no asistan a las consultas de control y seguimiento por miedo a la discriminación y a ser juzgado por los proveedores de salud. La discriminación nace desde la falsa creencia y mitos alrededor de las infecciones, derivados de la carencia de una educación integral en sexualidad; también al señalar a las personas con estos diagnósticos como irresponsables y que no cuidan de su salud sexual. Sin embargo, científicamente cualquier persona sexualmente activa corre el riesgo de contraer cualquiera de las ITS si no usa el condón o preservativo, que es el único método eficaz para prevenirlas.
Por esta razón y cónsonos con el propósito, PLAFAM considera fundamental la educación y actualización constante tanto de los/as usuarios/as como de su personal, a través de charlas, folletos, carteleras informativas, afiches, entre otros recursos para promover la no discriminación. Así mismo, en el año 2010, se establecieron lineamientos y consideraciones para evitar discriminación laboral a las personas que viven con VIH, por lo que se espera que lo/as empleado/as de la asociación que viven con VIH/sida puedan, en forma espontánea y estrictamente confidencial, contactar a un profesional especializado de la organización para tener en cuenta su condición, siempre bajo la premisa de la protección laboral y el resguardo de su salud en el contexto de trabajo.
Un diagnóstico temprano evita complicaciones
Algunas ITS, incluyendo el VIH, pueden ser asintomáticas por algunos años, es decir, la persona puede ser portadora del virus y contagiar a su pareja si no toma las medidas preventivas adecuadas. Por eso es importante, aunque no se manifieste ningún síntoma, hacer los despistajes para ITS de forma anual y, en aquellas personas que estuvieron expuestas a una ITS, lo más pronto posible. Esto puede ayudar a detectarlas y atenderlas a tiempo para prevenir que el estado de salud de la persona empeore a futuro. Tener VIH no significa tener sida, una persona con un diagnóstico temprano, que cumpla con las recomendaciones de su médico y con el tratamiento antirretroviral, puede continuar su vida sin problema.
Sobre el VIH
- No es una enfermedad ocupacional.
- Debemos romper los mitos y estigmas relacionados con el virus.
- Todos tenemos los mismos derechos.
- Podemos optar por estudios, trabajos y toma de decisiones en salud sexual y salud reproductiva
- Cerca del 70% de las infecciones ocurren a través de relaciones sexuales entre hombres y mujeres sin protección.
- El 50% de las nuevas infecciones ocurren en personas entre los 15 y los 24 años.
- El 90% de las personas que están infectadas no lo saben.
El programa de ITS/VIH-sida ofrece:
■ Consejería pre y post prueba de VIH.
■ Pruebas de laboratorio para detección de ITS/VIH.
■ Manejo de enfoque sindromático para el tratamiento de las ITS en las consultas de ginecología y urología.
■ Contacto directo con el servicio de infectología del Hospital Clínico Universitario para referir los casos detectados en PLAFAM.
■ Atención psicológica para personas que viven con VIH (PVVs) y sus familiares.
Acciones para la prevención
- Educación integral en sexualidad y asesoramiento antes y después de las pruebas de detección de las ITS.
- Consejería sobre prácticas sexuales más seguras, reducción de riesgos y fomento del uso de preservativos.
- Intervenciones dirigidas a grupos de población específicos, como los/as trabajadores/as sexuales, personas de la comunidad LGBTI y consumidores de drogas inyectables.
- Capacitación y actualización profesional al personal médico y prestadores de servicios en PLAFAM.
- Charlas y formación a jóvenes, adolescentes y adultos para el conocimiento del tema.
- Asesoramiento y orientación en salud sexual y reproductiva adaptados a las necesidades de los/as adolescentes. El asesoramiento puede mejorar la capacidad para reconocer los síntomas de las ITS, con lo que aumentarán las probabilidades de que se solicite atención o se aliente a las parejas sexuales a hacerlo.
Detección temprana con la asistencia a la consulta ginecológica (mujeres) y urológica (hombres) anual, realización de exámenes de sangre para descartar sífilis (VDRL), VIH (ELISA) y serología de hepatitis; citología (mujer) para detectar VPH, gonorrea, tricomoniasis y clamidia, examen de PCR para detectar VPH en hombres. .